Astrocuradores
Con nuestras cuatro herramientas y con las pautas y criterios de prescripción de nuestro sistema explorativo de revelación y transformación personal, en Astrología Explorativa realizamos infinidad de formulaciones que, con base en la singularización de la carta astral de cada persona, nos permiten observarnos y favorecer una transmutación de conciencia.
Desde ese lugar, destacar unas prescripciones sobre otras carecería de sentido, pues cada una tiene plena razón de ser en el foco de trabajo interior sobre el que se proyecta. Por ejemplo, tan próspero es abordar la herida quironiana en la que hacemos identidad de dolor, como la represión lilithiana de nuestra libertad más íntima, como observar un planeta que en nosotros se manifieste en cronicidad o desajuste o, en fin, por cerrar los ejemplos, la purificación de las negatividades que el yo haya provocado en la interiorización que hacemos de la información y energía que sostiene todo lo que vivimos.
Sin embargo, recoger aquí los Astrocuradores, aunque sean únicamente dos de las centenares de prescripciones explorativas que formulamos, tiene esta vez una doble razón de ser.
Señaladamente y, en primer lugar, dotar de importancia, protagonismo y relevancia central a nuestro patrón holístico del Ascendente astrológico, a menudo rechazado por nuestro psiquismo, ensordecido hasta el punto de llevarnos a considerarlo como algo ajeno. El Ascendente es nuestro código de comunicación con el cosmos, el sello que el cielo grabó en nosotros en el momento de nuestro nacimiento, la energía pura que nada ni nadie puede manipular y que, como pocas otras frecuencias, puede cooperar en que sintamos la vibración de canalización de lo primordial que nos da sustento y sentido.
Además, con este protagonismo que otorgamos a los Astrocuradores, tanto al Astrocurador cuerpo como al Astrocurador psíquico de los que ahora te hablaremos, queremos poner en valor esas dos fórmulas nacidas en el seno de nuestra comunidad de Astrología Explorativa, creadas por Koldo Santiago, pero aplicadas por todos los que integramos esta red y progresivamente por más y más personas, que lo emplean de una forma creciente y cada vez más extendida.
Es importante que sepas que su prescripción puede concretarse con las cuatro herramientas explorativas de Astrología explorativa, esto es, con visualización y coloreado de símbolos, con lenguaje arquetípico, música del Universo y flores de Bach, y que, por si fuera poco, tiene materializaciones heterogéneas, ya que se están aplicando no solo de manera directa, con las pautas de concreción de esas cuatro herramientas y el empleo directo de ellas, sino también tomando como base una pluralidad creciente de soportes (jabones, cremas, acupuntura, etc.).
El cuerpo es la vasija del alma; en la carne toma forma fractal la luz infinita, la energía pura que nos constituye.
Considerando que el cuerpo resulta una materialización tangible de lo que es sustancia en aquel campo energético invisible, de luz pura y sutil, era lógico concluir que, de espaldas a ese patrón de luz, no podría darse equilibrio corpóreo, consistencia funcional y orgánica, sino, inevitablemente, alteración del organismo a través de síntomas y enfermedad.
El Ascendente astrológico ha sido asociado con el cuerpo en muy diversas doctrinas, en tanto que este es nuestro altar cósmico, la forma sagrada de recepción de aquella energía de luz en acción que estaba activa en el momento del nacimiento.
Astrocurador cuerpo de Virgo (utilizando la herramienta música del universo):
- Astrocurador cuerpo – Ennio Morricone, The Braying Mule
- Virgo limitación – Elmer Bernstein, To Kill a Mockingbird
- Virgo virtud – Steve Reich, Tehilin. “Insomnio & Synergy vocals”
El punto ascendente de la evolución o el signo ascendente en nuestro momento natal, así pues, anunciaba un potencial de energía purificadora y sanadora del cuerpo que por ese campo primordial está conformado. Después de una larga exploración que ha acreditado reiteradamente lo que imaginamos, pues lo considerábamos arquetípico, se definió el Astrocurador cuerpo. Lo prescribimos en diversas modalidades: con esencias florales, glifos astrológicos y música y lenguaje arquetípicos. El Ascendente, en suma, es un patrón ejemplar, un molde original, una estructura eterna, una forma sustancial que activa la conexión intrínseca y secreta con nuestro sanador interior, con esa esencia pura de luz que nos configura y que al cuerpo purifica. Desde ello, Koldo Santiago (creador de la fórmula del Astrocurador cuerpo), propuso esta formulación cada vez más extendida en su empleo sanador.
El Astrocurador cuerpo es, así, un instrumento para la activación de nuestro patrón holístico direccionado al cuerpo como punto focal. No es una fórmula mágica para curar enfermedades, sino un activador del dibujo que somos del Universo en la forma. Abrazados en este, sintiendo como nos configura, el cuerpo se fusiona con la luz que refleja y, derivadamente, fortalece la conciencia de sus sistemas orgánicos y su energía.
Lo diferenciamos en sus 12 hipótesis, en función del signo del Ascendente del destinatario. 12 fórmulas que excitan nuestra sustancia primera, que nos reúnen con el soplo original que nos dio forma desvelando lo que hemos ido obstruyendo (pero somos).
Jabón elaborado con las esencias del Astrocurador psíquico, por @lola.morgana
- Astrocurador psíquico – Arvo Pärt, Festina Lente for String Orchestra and Harp
- Acuario limitación – Bernard Herrmann, Memories
- Acuario virtud – Joe Hisaishi, Sense of the light